El Texas Blues nació en los primeros años de la década de 1900 entre los afroamericanos que trabajaban en las refinerías de petróleo, ranchos y campamentos madereros. En la década de 1920, Blind Lemon Jefferson innovó el estilo utilizando una improvisación basada en el jazz y el acompañamiento de una guitarra; la influencia de Jefferson definió claramente este estilo e inspiró a intérpretes posteriores como Lightnin’ Hopkins y T-Bone Walker. Durante la Gran depresión, en la década de 1930, muchos intérpretes de blues se trasladaron a ciudades como Galveston, Houston y Dallas. Fue, desde esas ciudades, donde aparecieron nuevos intérpretes, incluyendo al guitarrista y cantante de gospel Blind Willie Johnson y la legendaria vocalista Big Mama Thornton. Las compañías discográficas Duke Records y Peacock Records fueron las más importantes dentro del Texas blues en aquella época.
En la década de 1960, la industria del blues se trasladó al norte de los Estados Unidos, reduciéndose así la importancia de Texas en el género del blues. Texas volvió a recobrar protagonismo en la década de 1970 cuando se desarrolló el blues rock tejano, liderado este estilo por ZZ Top y The Fabulous Thunderbirds, marcando así el resurgir de la importancia del Texas blues, hecho que motivó la aparición de músicos como Stevie Ray Vaughan y el traslado de la capital del blues de Texas hacia Austin.
Algunos consejos para tocar este estilo en guitarra:
1) Recordemos que simultáneamente podemos ejercitar la mano derecha con un movimiento alterno de púa, cada vez que tocamos. Esta técnica se denomina «alternate picking» o púa alterna.
2) Es muy recomendable usar metrónomo, lo mejor es empezar con un tempo que dominemos, más bien bajo, e ir incrementando siempre que tengamos soltura suficiente, estemos pulsando correctamente los trastes y sonando limpiamente.